A días de empezar un nuevo año, organizaciones que promovemos el relanzamiento del Frente Amplio nos ratificamos en nuestro rechazo a la ley 30288 que quita a los trabajadores jóvenes el derecho a recibir dos gratificaciones, la CTS y la mitad de días vacaciones. Respaldamos la lucha de la juventud peruana en contra de este intento explotador y llamamos a nuestros militantes, simpatizantes y ciudadanía en general a seguir exigiendo de manera pacífica en todos los espacios su inmediata derogatoria. 

Consideramos que los derechos laborales deben mantenerse y ampliarse para todos las y los trabajadores peruanos sin ninguna discriminación. Rechazamos por eso la ley “pulpín” así como los regímenes especiales actualmente vigentes que recortan derechos laborales en el agro, en las empresas conserveras, en la actividad textil, en las actividades de los exportadores no tradicionales y en las pymes.

Planteamos que se debata y apruebe una nueva Ley General del Trabajo, que recupere los derechos de los peruanos en toda la actividad laboral vigente y los garantice a quienes se incorporan, sin discriminación alguna, y que se derogue toda ley que restrinja derechos laborales sea de la actividad que fuese.

No es cierto que la ley 30288 vaya a generar empleo para los jóvenes. Si el desempleo juvenil se resolviera pagando menos, hace mucho que ese problema se habría resuelto. Para que haya creación de empleos se requiere la reactivación de los sectores que necesitan más trabajo para producir, como la industria, la agricultura, el turismo, la construcción, los servicios y las pymes.

De mantenerse vigente la ley “pulpín” las grandes empresas, utilizando vericuetos legales y aprovechándose de la debilidad institucional, despedirán trabajadores jóvenes y adultos con derechos, y los reemplazarán por jóvenes sin derechos, para así lograr aumentar sus ganancias en más de mil millones de soles anuales. Esta reconcentración de la riqueza achicará el mercado interno, ahondará el frenazo económico y agudizará los serios problemas sociales que actualmente tenemos.

La ley “pulpín” es una muestra más de que tenemos un régimen que desde los noventa es dominado por los lobbies de la CONFIEP, SNI, ADEX y por los monopolios económicos, que consideran que la opinión de la juventud y del pueblo en general no merece ser escuchada. Este gobierno que ha traicionado el programa de gobierno con el que fue elegido actúa sin legitimidad democrática, aprobando esta antipopular medida en vísperas de las fiestas de fin de año, pensando que así nos olvidaríamos de sus tropelías. No lo lograrán.

Exigimos a los congresistas de las diversas bancadas que se sumen a la convocatoria de un Pleno Extraordinario para derogar la Ley 30288. Demandamos al gobierno que deje de gobernar como mesa de partes de la CONFIEP, cargando los costos de la reactivación y el crecimiento económico a la sociedad; basta de traiciones a la voluntad popular expresada en las elecciones presidenciales de 2011.

Llamamos a todos los actores sociales a convocar la I CONFERENCIA NACIONAL DEL TRABAJO, que proponga una adecuada relación laboral en el país para modificar la legislación neoliberal avalada por el fujimorismo, el toledismo, el aprismo y el humalismo, que tenga como objetivo dotar al país de una LEY GENERAL DEL TRABAJO.

Seguiremos con nuestro apoyo a la lucha pacífica de los jóvenes, que es la lucha de todo el pueblo peruano en defensa de sus derechos.

¡NO A LA LEY 30288!

¡ABAJO TODAS LAS LEYES QUE RECOORTAN DERECHOS LABORALES!

Grupo por el Relanzamiento del Frente Amplio